miércoles, 26 de mayo de 2010

Sol de Invierno

Todo. Nada. Sueños. Ilusión. Desilusión. Sombras. Desconfianza. Amor. Polvo. Metal. Confianza. Rojo. Blanco. Odio. Nada. Nada. Nada.
Miedo. Dolor. Camino. Esperanza. Ingenuidad. Valor. Resignación. Terror. Vacío. Lluvia. Sol de invierno. Nada.

lunes, 10 de mayo de 2010

Y se encontró de nuevo en la oscuridad. Gateó hasta su cama, y se acobijó bajo las sábanas... Ahí estaba, aquel lugar que la acompañó en sus desvelo, escuchó tantas conversaciones, y que tantas veces la vió llorar. Mas, ahora era otra noche más, donde su cuerpo tiritaba en la oscuridad de la noche, en donde la almohada quedó humeda, y las sábanas goteaban dolor. Sus ojos comenzaron a cerrarse al compás de su agitada respiración.

sábado, 8 de mayo de 2010

Ella

Todos las veía caminar por los pasillos, deslizarse, casi bailar camino a clases. Todos la veían leyendo en la biblioteca, tomando los libros con gracia y delicadeza. Común era verla tomar café en la cafetería, rodeada de amigos. Verla conversando, verla meditando.

Ella, perfecta. La princesa de donde iba, la más bonita del lugar. La más inteligente de su promoción. Tranquila, apacible, grácil, delicada, todas la envidiaban, y todos querían estar con ella, pero nadie lo conseguía. Inalcanzable.

Ella, amable. Preocupada de quienes la rodeaban, siempre atenta, siempre protegiendo. Pero nunca protegida.

Ella, delicada. Incluso cuando se apoyaba en la micro, camino a sus compromisos, delicada. Perspicaz, astuta.

Ella, ella, ella... todos pensaban en ellas. No existía la indiferencia. Ella marcaba la diferencia.

Quién se iba a imaginar, que tras de aquellos ojos azules, tras esa cutis de porcelana y aquella nariz respingada, se escondía una tormenta, una lluvia de dudas, relámpagos de inseguridades, truenos de dolor.