lunes, 23 de mayo de 2011

Ending

Qué escribir cuando tus párpados parecen aún tatuados en rojos...
Qué hacer cuando sigues dudando, pero antes no era lo mismo, y empiezas a colapsar...
No sabes qué hacer, no sabes cómo reaccionar.
Pero sabes que el primer paso es... la calma. Logrando la calma, todo puede mejorar. O al menos se puede intentar.
Y es más difícil cuando ya haz pasado malos ratos, pero ninguno era cómo éste... éste es peor.
Y se complica más cuando sé de tu hermetismo, de tu boca cerrada y ojos limpios.
Peor es cuando me siento sola, más sola que nunca. Y no tengo tiempo para caerme o tropezar, porque no se me ha dado ni un minuto más.
Corroboras que los extremos son malos... pero no has llegado al punto medio.
Y sabes que tienes tiempo limitado antes de que todo sea demasiado tarde.
La culpa no te deja tranquilo.
Quieres hacer nada. Pero es imposible, pues, no te dieron ni un minuto más.
Y estas cosas pasan cuando sabes que estuvo en todo, lo ves en todo. Está en todo, y seguramente estará.
La incertidumbre es de las peores cosas que pueden ocurrir.
Y quieres desaparecer todo el tiempo... y te caes más cuando te das cuenta de que él es el único que te podría entender en un momento así... y con 1 palabra, te calmas (que lo hace más doloroso).